El día 19 fue un día especial… en el que se nos convocaba a RECUPERAR EL 0,7 %
El clamor se respiraba ya desde ese primer momento de saludos emocionados… ¡No son solo recortes… qué va!!! Estamos hablando de ideología… con una carga de profundidad tremenda… Nos venden, como única salida, una nueva manera de mirar la vida, el mundo… el universo entero… las personas… Bajo el único cristal del dios dinero y de la eficacia… Y de esa frase asesina que define el neoliberalismo más feroz… ¡Cada uno tiene lo que se merece!
Pero en esto, amigo, no hay escapatoria… Cada uno/a definimos nuestra apuesta por la solidaridad cuando acotamos sus destinatarios… Cuando decidimos hasta donde queremos llegar…. Cuando nombramos a los que son nuestros semejantes… Familia… amigos… Cercanos… De nuestra tierra?, país?… o de todo el mundo?… Nuestra solidaridad, la marcamos cuando fijamos la frontera que cada uno le quiere poner.
Y a ese dilema nos enfrentamos solos con nuestra conciencia y con la historia… Porque cada cual es libre de decidir quién es su prójimo, quién es de los suyos… Hasta donde llega la defensa de la dignidad… Que soñamos para todos los hombres y mujeres del planeta actual y de las generaciones futuras…
El 0,7 % fue un movimiento que surgió hace 18 años… Cuando ya Naciones Unidas había incumplido sistemáticamente el compromiso de ayuda a los países empobrecidos…
El 0,7% acampó en Zaragoza en el Paseo de la Constitución y le puso nombre de sueño ciudadano… Pero también acampó en nuestros corazones y hoy, desde la Federación Aragonesa de Solidaridad, nos llamaban a recuperar ese espíritu…
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Como en los viejos tiempos… Nos hemos juntado gente joven y ya veteranos… De todos los colores y las procedencias… de todas las organizaciones… bregados ya en tantos compromisos… en un aula del Pignatelli, tan simbólico y tan importante en la historia de la cultura de la paz en el mundo… Además de los compañeros de camino… Estaba la gente de la Cooperación…, todos hombres y mujeres de fuertes convicciones… que entienden de justicia, de derechos humanos y de rostros y manos compañeras…
El 0,7% hablaba de justicia, de devolver a los países pobres lo que les hemos robado a lo largo de la historia… que también se la intentamos robar. Un compromiso que aceptaron montones de administraciones públicas y que hoy se incumple con una impunidad que asusta.
Hablaba de cambiar el norte y de cambiar nuestros corazones y nuestros hábitos, para ser capaces de hacer posible que otros y otras vivan más felices.
El Gobierno aprobó el día 20 por mayoría absoluta, la casi desmantelación de la Ayuda al Desarrollo… El termómetro más importante para medir la calidad democrática y solidaria de una sociedad… Un día triste… otro más… Donde aquéllos que hace 18 años eran nuestros referentes… hoy son compañeros de escuela y de sanidad, aunque ellos sin derechos… como entonces…
Es inaceptable el mundo profundamente injusto que hemos construido… es bien duro escuchar como discurso que primero son nuestros pobres… Es bien difícil hacer pedagogía social, para que los chavales entiendan que nuestros derechos, nuestro bienestar, siempre ha sido a costa de que muchos millones de personas caminen en la indigencia y la exclusión… Que esta crisis que nos envuelve y nos duele… es el hogar donde se han construido millones de historias de chavales como ellos desde hace decenas de años…
Sin duda, amigos y amigas de la FAS… lo habéis convertido en un día para la lucha y la esperanza. Gracias.
El clamor se respiraba ya desde ese primer momento de saludos emocionados… ¡No son solo recortes… qué va!!! Estamos hablando de ideología… con una carga de profundidad tremenda… Nos venden, como única salida, una nueva manera de mirar la vida, el mundo… el universo entero… las personas… Bajo el único cristal del dios dinero y de la eficacia… Y de esa frase asesina que define el neoliberalismo más feroz… ¡Cada uno tiene lo que se merece!
Pero en esto, amigo, no hay escapatoria… Cada uno/a definimos nuestra apuesta por la solidaridad cuando acotamos sus destinatarios… Cuando decidimos hasta donde queremos llegar…. Cuando nombramos a los que son nuestros semejantes… Familia… amigos… Cercanos… De nuestra tierra?, país?… o de todo el mundo?… Nuestra solidaridad, la marcamos cuando fijamos la frontera que cada uno le quiere poner.
Y a ese dilema nos enfrentamos solos con nuestra conciencia y con la historia… Porque cada cual es libre de decidir quién es su prójimo, quién es de los suyos… Hasta donde llega la defensa de la dignidad… Que soñamos para todos los hombres y mujeres del planeta actual y de las generaciones futuras…
El 0,7 % fue un movimiento que surgió hace 18 años… Cuando ya Naciones Unidas había incumplido sistemáticamente el compromiso de ayuda a los países empobrecidos…
El 0,7% acampó en Zaragoza en el Paseo de la Constitución y le puso nombre de sueño ciudadano… Pero también acampó en nuestros corazones y hoy, desde la Federación Aragonesa de Solidaridad, nos llamaban a recuperar ese espíritu…
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Como en los viejos tiempos… Nos hemos juntado gente joven y ya veteranos… De todos los colores y las procedencias… de todas las organizaciones… bregados ya en tantos compromisos… en un aula del Pignatelli, tan simbólico y tan importante en la historia de la cultura de la paz en el mundo… Además de los compañeros de camino… Estaba la gente de la Cooperación…, todos hombres y mujeres de fuertes convicciones… que entienden de justicia, de derechos humanos y de rostros y manos compañeras…
El 0,7% hablaba de justicia, de devolver a los países pobres lo que les hemos robado a lo largo de la historia… que también se la intentamos robar. Un compromiso que aceptaron montones de administraciones públicas y que hoy se incumple con una impunidad que asusta.
Hablaba de cambiar el norte y de cambiar nuestros corazones y nuestros hábitos, para ser capaces de hacer posible que otros y otras vivan más felices.
El Gobierno aprobó el día 20 por mayoría absoluta, la casi desmantelación de la Ayuda al Desarrollo… El termómetro más importante para medir la calidad democrática y solidaria de una sociedad… Un día triste… otro más… Donde aquéllos que hace 18 años eran nuestros referentes… hoy son compañeros de escuela y de sanidad, aunque ellos sin derechos… como entonces…
Es inaceptable el mundo profundamente injusto que hemos construido… es bien duro escuchar como discurso que primero son nuestros pobres… Es bien difícil hacer pedagogía social, para que los chavales entiendan que nuestros derechos, nuestro bienestar, siempre ha sido a costa de que muchos millones de personas caminen en la indigencia y la exclusión… Que esta crisis que nos envuelve y nos duele… es el hogar donde se han construido millones de historias de chavales como ellos desde hace decenas de años…
Sin duda, amigos y amigas de la FAS… lo habéis convertido en un día para la lucha y la esperanza. Gracias.
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